Cuando se perfecciona el patinaje sobre hielo, es increíble verlo.
El patinador puede girar, deslizarse y saltar de formas que quizás no creías posibles.
Y lo bueno del deporte es que no es necesario ser un adulto para participar en la acción.
Hay jóvenes patinadores sobre hielo de todo el mundo que ya han dominado la capacidad de dejar sin sentido a las multitudes con sus increíbles rutinas.
Tomemos a Verónica Zhilina, por ejemplo.
Con solo 10 años, Verónica patina al nivel de alguien que tiene tres veces su edad.
Ella es de Moscú, Rusia, y parece estar en lo suyo cuando actúa en el hielo frente a grandes multitudes.
En el siguiente video, puedes ver cómo Verónica realiza una rutina asombrosa con la canción “Aleluya”.
Para empezar, Verónica se para en medio del hielo, esperando que empiece la música.
Cuando lo hace, revela algo que había estado sosteniendo en sus manos: una luz.
La levanta hacia el cielo con los brazos extendidos.
Luego deja caer un brazo, gira y se lo muestra a la multitud detrás de ella.
Cuando lo hace, ocurre algo hermoso.
El resto de la multitud también tiene luces y cuando ella les ilumina, ellos le devuelven la luz.
Las luces se mueven de un lado a otro en el escenario obscuro, preparando el lugar para una rutina cargada de emociones y sensibilidad.
Verónica coloca la luz sobre el hielo y se aleja patinando mientras la letra de la canción comienza a sonar.
Ella comienza su rutina balanceando los brazos y girando suavemente mientras se desliza sobre el hielo.
Verónica no tarda mucho en sorprender a la multitud con algunas demostraciones de su increíble equilibrio y flexibilidad.
Se lleva una pierna a la cabeza y la aprieta con fuerza.
Ahora, ella está patinando sobre un pie, mientras hace las divisiones verticales.
La multitud muestra su aprobación rompiendo en aplausos.
Pero Verónica tiene reservado para la audiencia mucho más que una simple demostración de flexibilidad.
Rápidamente se mueve hacia el primero de muchos movimientos técnicos que la involucran dando vueltas a altas velocidades mientras está en el aire.
Verónica coge velocidad y se lanza al aire.
Ella se enrolla en una espiral apretada y gira tan rápido que ni siquiera se puede saber cuántas rotaciones hace antes de aterrizar con gracia sobre el hielo.
Después de realizar este movimiento, Verónica mantiene su velocidad y se desliza alrededor de la pista de hielo, moviendo su cuerpo al ritmo de la música y agregando imágenes impresionantes a una canción ya hermosa.
Verónica luego salta en el aire y gira rápida y graciosamente, como lo hizo antes.
La multitud ama lo que está viendo y estalla en aplausos una vez más.
Cuando la rutina llega a su fin, Verónica regresa al centro del hielo donde dejó la luz al principio de la rutina.
La toma y gira con ella, moviendo los brazos, las piernas y la cabeza en varias posiciones.
Ella sale del giro cerrado y levanta la luz en el aire, terminando su rutina de la misma manera que comenzó.
¡Chequea el video a continuación para ver la rutina completa de Verónica y asegúrate de compartirlo con un amigo!
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